El sistema óseo es una complicada y perfecta estructura que está formada básicamente por 206 huesos. Junto al sistema articular y el sistema muscular forman el aparato locomotor.
Aquí te dejamos un artículo bastante amplio sobre el sistema óseo, que puede ayudarte, cuando impartas en clases el tema sobre este sistema, En él encontrarás las funciones del sistema óseo, cómo se clasifican los huesos, y los huesos más importantes que forman el esqueleto humano.
Los huesos y otras estructuras rígidas están conectadas por ligamentos y unidas al sistema muscular a través de tendones. Otro componente del sistema óseo son los cartílagos, que complementan su estructura. En los seres humanos, por ejemplo, la nariz y orejas están sustentadas por cartílago. Algunos organismos tienen un esqueleto interno compuesto enteramente de cartílago, sin huesos calcificados, como en el caso de los tiburones.
Funciones del sistema óseo
Los huesos cumplen tres funciones fundamentales: proporcionar sostén al organismo, constituir los segmentos móviles del sistema de palancas configurado junto a las articulaciones y músculos, brindar protección a los órganos y tejidos internos:
- Soporte: Los huesos proveen un cuadro rígido de soporte para los músculos y tejidos blandos.
- Protección: Los huesos forman varias cavidades que protegen los órganos internos de posibles traumatismos. Por ejemplo, el cráneo protege el cerebro frente a los golpes, y la caja torácica, formada por costillas y esternón protege los pulmones y el corazón.
- Movimiento: Gracias a los músculos que se insertan en los huesos a través de los tendones y su contracción sincronizada, se produce el movimiento.
- Homeostasis mineral: El tejido óseo almacena una serie de minerales, especialmente calcio y fósforo, necesarios para la contracción muscular y otras muchas funciones. Cuando son necesarios, el hueso libera dichos minerales en la sangre que los distribuye a otras partes del organismo.
- Producción de células sanguíneas: Dentro de cavidades situadas en ciertos huesos, un tejido conectivo denominado médula ósea roja produce las células sanguíneas rojas o hematíes mediante el proceso denominado hematopoyesis.
- Almacén de grasas de reserva: La médula amarilla consiste principalmente en adipocitos con unos pocos hematíes dispersos. Es una importante reserva de energía química.
Huesos
El hueso es un órgano firme, duro y resistente que forma parte del endoesqueleto de los vertebrados. Está compuesto principalmente por tejido óseo, un tipo especializado de tejido conectivo constituido por células, y componentes extracelulares calcificados. Los huesos también poseen cubiertas de tejido conectivo (periostio) y cartílago (carilla articular), vasos, nervios, y algunos contienen tejido hematopoyético y adiposo (médula ósea).
Partes del hueso
Los huesos están unidos entre sí gracias a unas estructuras llamadas articulaciones.
Hay que tener en cuenta que los huesos no son estructuras inmóviles, se mueven unos respecto a otros. Las articulaciones posibilitan el movimiento de los huesos. Dependiendo del grado de movimiento que permiten hay tres de articulaciones:
- Las articulaciones móviles son aquellas que permiten un movimiento amplio de los huesos (Ej.: las articulaciones de la rodilla, el codo, la cadera y el hombro).
- Las articulaciones semimóviles son aquellas que permiten un movimiento escaso de los huesos (Ej.: las articulaciones que existen entre las vértebras que forman la columna vertebral).
- Las articulaciones fijas son aquellas que no permiten el movimiento de los huesos (Ej.: las articulaciones de los huesos del cráneo).Su función suele ser proteger los órganos internos a los que rodean.
Gracias a las articulaciones podemos movernos y nuestros órganos están protegidos.
Ligamentos y cartílagos
- Los cartílagos (tejido flexible y grueso ubicado en los extremos de los huesos) protegen los huesos y les sirven de amortiguación cuando se unen y friccionan uno contra otro en las articulaciones. El tejido que forma los cartílagos se llama tejido cartilaginoso. Podemos encontrar cartílagos en las articulaciones (facilitando el movimiento de los huesos), en las orejas, en la nariz, en la tráquea, etc.
- Los ligamentos son unas tiras de tejido muy resistente que unen los huesos en las articulaciones móviles y semimóviles. Por ejemplo el húmero se une mediante un ligamento al radio y mediante otro ligamento al cúbito.
Podemos encontrar cartílagos en las articulaciones (facilitando el movimiento de los huesos), en las orejas, en la nariz, en la tráquea, etc.
Clasificación
Los huesos poseen formas muy variadas y cumplen varias funciones. Con una estructura interna compleja pero muy funcional que determina su morfología, los huesos son plásticos y livianos aunque muy resistentes y duros.
El conjunto total y organizado de las piezas óseas (huesos) conforma el esqueleto o sistema esquelético. Cada pieza cumple una función en particular y de conjunto en relación con las piezas próximas a las que está articulada.
La superficie de los huesos presenta prolongaciones, protuberancias y tuberosidades, en las que se insertan los ligamentos de las articulaciones y los tendones de los músculos, y una gran variedad de irregularidades como surcos, poros y depresiones por las que discurren y penetran los vasos sanguíneos y los nervios. Están formados por tejido óseo, cartílagos, médula ósea y el periostio o membrana que rodea los huesos.
Los huesos se clasifican según su forma en :
- Huesos largos, son los que tienen forma de tubo alargado. Por ejemplo, el hueso más largo del cuerpo, el fémur, que se encuentra en la pierna.
- Huesos cortos, son aquellos que también son alargados, pero cuya longitud apenas es de unos centímetros. Por ejemplo están los huesos de los dedos de la mano.
- Huesos planos, son aquellos que tienen forma plana, por ejemplo el omoplato o los huesos que forman el cráneo.
- Huesos irregulares, son aquellos cuya forma no permite que se clasifiquen en ninguna de las categorías anteriores. Por ejemplo los huesos de las vértebras.
Pero también según el tipo de tejido que los componen:
El tejido compacto tiene un aspecto macizo, mientras que el tejido esponjoso se caracteriza por los espacios abiertos parcialmente rellenos. Cada hueso cumple una función especial en el sistema. Los huesos no son estructuras lisas, ellos presentan protuberancias y partes rugosas.
Descripción de los huesos
Para el estudio del esqueleto humano se consideran tres regiones:
- Cabeza (cráneo y cara)
- Tronco (Columna vertebral y caja torácica)
- Extremidades superiores (brazos, antebrazos y manos) e inferiores (muslos, piernas y pies).
Huesos de la cabeza
Para estudiar los huesos, que son 22, se pueden considerar dos partes: el cráneo y la cara.
Huesos del cráneo
Los huesos del cráneo desempeñan funciones de protección para el encéfalo son los siguientes: un frontal un occipital situado en la región post-inferior del cráneo; dos temporales localizados uno a cada lado del cráneo a nivel de los oídos; dos parietales que se encuentran a cada lado de la cabeza hacia la parte superior por encima de los temporales; un esfenoides que se encuentra formando la base anterior del cráneo y un etmoides situado entre el frontal y el esfenoides.
Huesos de la cara
La región de la cara comprende 14 huesos que contribuyen a formar cavidades. Todos los huesos de la cara están soldados al cráneo, excepto el maxilar inferior que se articula al cráneo por una articulación móvil. Estos huesos son:
- Dos nasales, dos malares, dos lagrimales o unguis, dos cornetes inferiores , dos palatinos, dos maxilares superiores, el maxilar inferior y finalmente el vómer que forma parte del tabique nasal.
Huesos del tronco
El tronco está constituido por 58 huesos y para su estudio se consideran las partes siguientes: la columna vertebral, las costillas y el esternón.
La columna vertebral
La columna vertebral constituye el eje del cuerpo y está situada en la línea media posterior del cuerpo. Se extiende desde la base del cráneo hasta la región coxígea. Está constituida por 33 vertebras que se unen por discos cartilaginosos invertebrales. La columna vertebral está constituida por las vertebras cervicales, dorsales, lumbares, sacras y coxígeas.
Las costillas
Las costillas
Son huesos largos arqueados y planos que se articulan por detrás con la columna vertebral y por delante con el esternón. Son doce pares de los cuales los siete primeros forman las costillas verdaderas, pues se unen directamente al esternón. Los tres siguientes constituyen las costillas falsas, ya que no se unen al esternón sino a los cartílagos de las costillas verdaderas. Los dos últimos pares reciben el nombre de costillas flotantes porque su extremidad anterior queda libre.
El esternón
Es un hueso plano situado por delante en la línea media del cuerpo. En el esternón se apoyan las dos clavículas y los diez primeros pares de costillas.
Huesos de las extremidades superiores
Las extremidades superiores tienen como función tomar los objetos y servir como defensa. Para estudiar los huesos de las extremidades superiores se pueden distinguir: el hombro, el brazo, el antebrazo y la mano.
Huesos del hombro
El hombro está formado por la clavícula y el omóplato. Al conjunto de huesos que forman los hombres se le conoce con el nombre de cintura escapular.
Hueso del brazo
Esta formado por un solo hueso, el húmero.
Huesos del antebrazo
Consta de dos huesos: el cúbito situado hacia adentro y el radio hacia afuera.
Huesos de la mano
La mano consta de 27 huesos y está dotada de gran movilidad y agilidad. En la mano podemos diferenciar 3 regiones: el carpo, el metacarpo y los dedos.
- El carpo: está formado por ocho huesos pequeños dispuestos en dos filas.
- El metacarpo corresponde a la palma de la mano y esta formado por cinco huesos metacarpianos.
- Los dedos que están formados por tres huesos cada uno: falange, falangina y falangeta
Huesos de las extremidades inferiores
Para estudiar los huesos de las extremidades inferiores se dividen en cuatro regiones: cadera o cintura pélvica, muslo, pierna y pie.
Huesos de la cadera o cintura pélvica
La cadera sirve de fijación a las extremidades inferiores y está formada por dos huesos grandes, los ilíacos o coxales que provienen de la soldadura de tres huesos: el ileón, el pubis y el esquión.
Hueso del muslo
Está constituido por un solo hueso, el fémur que va desde la cadera hasta la rodilla, se articula con la cavidad cotiloidea del ilíaco.
Huesos de la pierna
Está constituida por dos huesos largos: la tibia, hacia el lado interno, y el peroné, hacia el lado externo; la rótula, que forma parte de la articulación de la rodilla
Huesos del pie
Los huesos del pie se distribuyen en tres grupos: tarso, metatarso y dedos.
El tarso constituye el empeine del pie y comprende siete huesos: el astrágalo, que se articula con la tibia y el peroné; el calcáneo que forma el talón; el cuboides, el escafoides y los tres cuneiformes.
El metatarso o planta del pie está formado por cinco huesos metatarsianos.
Los dedos están formados por tres falanges cada uno, como en los dedos de la mano.
En el siguiente mapa conceptual verás que el aparato locomotor está formado por el sistema esquelético, las articulaciones y el sistema muscular y en él aparecen especificaciones sobre el sistema óseo.
0 comentarios:
Publicar un comentario